Hasta los niños pueden comerse estas pinturas y no sólo no se intoxicarán, sino que estoy segura de que repetirán.
Es lo que le ocurrió a mi hija Jimena, aunque ya no es tan niña , con 17 recién estrenados.
Bizcocho de chocolate blanco con capas de butter cream con un toquecito de colorante rosa y con capas de crema de cacao. Está cubierto con una especie de fondant de chocolate blanco que está riquísimo.
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